No es lo mismo basura y residuos. La basura son los residuos de origen natural o industrializado que, al mezclarse, producen mal olor y pierden posibilidades de ser reutilizados o reciclados. La basura carece de “valor” alguno. Cuando la basura está separada, deja de ser “basura”: se trata de residuos, algunos de los cuales pueden ser reciclados, reutilizados y aprovechados y así evitar que lleguen a un relleno sanitario o sitio de disposición final.
Si te das a la tarea de separar tus residuos diariamente (orgánicos, inorgánicos, sanitarios y de manejo especial), notarás que algunos de ellos están hechos de materias primas recuperables como: papel, cartón, vidrio, algunos plásticos, metales, textiles, PET, tetrapack, entre otros. Con la sencilla tarea de separarlos, estos materiales pueden ser recuperados y posteriormente reciclados.
Por el contrario, si no separas tus residuos no podrán ser aprovechados para el reciclaje. Si sacas tus desechos mezclados con cáscaras, comida y restos orgánicos, se irán directo a un relleno sanitario para ser enterrados, nadie los podrá aprovechar y se convertirán en un pasivo ambiental, lo que significa que se volverá un agente de contaminación.
A partir del julio de 2016, todos los que vivimos en la Ciudad de México estaremos obligados a realizar otro tipo de separación, que te explicaremos en la sección Separa para Reciclar.
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