¡Detente! No todo lo que tiras al bote es basura. Los materiales de los que se componen nuestros desechos tienen la posibilidad de reincorporarse al ciclo de producción de nuevos bienes o productos, ¿lo sabías? 

La manera en la que desechamos lo que ya no nos sirve determina si su vida útil continuará o no, por eso, es importante saber diferenciar entre la basura y los residuos.

• Basura
• Residuo

La basura, cuando se maneja adecuadamente, se lleva a rellenos sanitarios para que pasen ahí el tiempo que requieran para poder desintegrarse a través de procesos físicos, químicos y biológicos naturales. Este tiempo es diferente para cada tipo de material, en particular para los plásticos son cientos de años. Mientras la basura se encuentra en estos sitios se liberan gases de efecto invernadero, conocidos por su capacidad de calentar la atmósfera y lixiviados tóxicos que contaminan agua, tierra y aire; esto daña a la salud ambiental y a la humana.

Basura son todos los residuos que desechamos revueltos, por lo mismo se complica su valorización en algún proceso posterior, como lo es el reciclaje. Sin embargo, lo ideal es evitar la generación de basura y un paso fundamental para hacerlo es separar los residuos por tipo para fomentar su aprovechamiento y que se reduzca significativamente la cantidad de basura que llegue a los rellenos sanitarios. Éste es el espíritu de Basura Cero.

Son todos aquellos materiales que, luego de haber cumplido su función, son separados en botes diferentes por tipo de material como papel, cartón, vidrio, plástico, metal, pilas, electrónicos, textiles, maderas u otros más, evitando que se mezclen entre sí; esto facilita su aprovechamiento, ya que pueden ser reutilizados, reciclados o comercializados.

Estos materiales tienen valor económico y ambienta, dado que se convierten en materia prima en la producción de nuevos bienes, así se evita la extracción de materia prima virgen desde la naturaleza; es decir, se dejan de hacer hoyos a la tierra y se preserva su salud. Además, mientras la salud ambiental sea buena, esto beneficia directamente a la salud humana y a todos los seres vivos.

En la ciudad generamos una gran cantidad de basura, por lo que en 2011 el Gobierno de la Ciudad de México cerró el último relleno sanitario al haber llegado al límite de su capacidad. Desde entonces, hasta la fecha, llas más de 12 mil 404 toneladas de basura generadas  diariamente en la ciudad son enviadas a sitios de disposición final en el Estado de México y Morelos, hecho que representa un gasto muy importante en el presupuesto capitalino.  A través de nuevas estrategias y políticas ambientales se ha logrado disminuir la cantidad de residuos llegan diariamente a las Estaciones de Transferencia, al pasar de 8 107 t/día en el 2018 a 7 494 t/día en el 20221¹.

Para lograr transitar hacía una Ciudad Basura Cero es necesario adoptar hábitos de consumo y desecho responsables, la gestión y el manejo integral de los residuos no es posible sin la participación de todos los actores involucrados. No lo olvides, haz tu parte y cambiemos juntos el futuro de la Ciudad de México.